
El Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) ha puesto su foco en Perú. Con el arranque del gobierno de Donald Trump, la agencia tiene como misión revertir un déficit comercial ascendente con la nación latina desde el 2009, cuando se firmó el Tratado de Libre Comercio (TLC) que los vincula. Gestión obtuvo detalles de este plan.
Daniel Whitley, administrador del Servicio Agrícola Exterior (FAS) del USDA respondió preguntas de este diario por escrito. El funcionario estuvo de visita esta semana en el Perú junto a 35 empresas, 17 asociaciones comerciales y funcionarios de 5 estados de su país para iniciar negocios con sus pares agrícolas peruanos.
La visión es revertir un déficit comercial millonario que, según afirmó, es de US$ 3.66 mil millones al cierre del 2024. En otras palabras: Perú exporta más a Estados Unidos (EE.UU.) que lo que este país le vende a la nación latinoamericana y eso quieren cambiarlo.
LEA TAMBIÉN: Remesas: cinco alternativas para recibir dinero desde los Estados Unidos
Esto ofrece Estados Unidos al Perú para enfrentar el déficit
Whitley aseguró que este déficit comercial ha crecido sustancialmente desde la entrada en vigencia del TLC. “Creció en US$ 3.4 mil millones de dólares desde menos de US$ 300 millones desde su implementación”, indicó. Aunque también el comercio bilateral se ha triplicado entre 2009 y 2024.
En dicho periodo, EE.UU. también aumentado sus exportaciones agrícolas a Perú en un 57%. Sin embargo, eso no es suficiente para la USDA, que busca acortar la brecha de envíos agrícolas. La nueva oferta estadounidense, comentó Whitley, es bien diversa.
“Este grupo diverso (la delegación) buscó conectarse con empresas peruanas en sectores como lácteos, carne de cerdo, snacks, panadería y confitería, vinos y licores, alimentos para perros y gatos, entre otros segmentos prometedores”, refirió el funcionario.

Las 35 empresas agroindustriales de EE.UU. que visitaron el Perú también proveen productos como mariscos, soya, frutas frescas, quesos y legumbres. Durante su visita al Perú, detalló Whitley, visitaron los supermercados Wong y Tottus, para que su delegación “se familiarice con los productos de interés del consumidor peruano”.
Además, sostuvieron reuniones con representantes del sector agroexportador peruano, quienes fueron acompañados también por el ministro de Agricultura y Riego (Midagri), Ángel Manero. Según precisó Whitley, la visita es el primer paso para concretar nuevos acuerdos de negocio entre las empresas peruanas y estadounidenses.
“Estas reuniones sientan las bases para el viaje de la secretaria del USDA, Brooke Rollins, a Perú programada para este año, con el fin de capitalizar los logros de esta misión y avanzar en nuevas oportunidades de comercio agrícola”, adelantó.
LEA TAMBIÉN: Peruanos quieren ganar S/ 3,252 al mes en promedio: ¿a qué puestos de trabajo apuntan?
Aranceles no deberían generar desconfianza en EE.UU.
Gestión también le consultó a Whitley si el cambio en la política comercial del gobierno de EE.UU., que implicó la aplicación de los llamados “aranceles recíprocos” a todo el mundo, incluido Perú, podría afectar el interés de las empresas peruanas en importar productos estadounidenses.
Como se recuerda, si bien la aplicación de estos gravamenes está suspendida por ahora, varios expertos peruanos en comercio exterior han remarcado que la incertidumbre y volatilidad sobre las decisiones en esta materia del presidente Donald Trump podrían afectar la relación comercial con este país.
Al respecto, el funcionario de la USDA reconoció que esta nueva visión de su país sobre la política comercial puede generar resistencia entre el empresariado peruano, pero minimizó su posible impacto en el objetivo de la agencia gubernamental que representa.
“Entendemos que los ajustes en la política comercial global pueden generar inquietudes, pero queremos enfatizar que el USDA sigue comprometido con su relación comercial con el Perú”, recalcó.
Whitley destacó que las empresas agrícolas de su país son reconocidas por la alta calidad de sus productos, lo que no se ve mermado por la nueva política comercial del gobierno de EE.UU.

De igual forma, recordó la larga vigencia de las relaciones bilaterales entre ambos países. A su consideración, está es la mayor prueba de que pueden generarse nuevos acuerdos de negocio en el futuro, más allá del gobierno de turno en su nación.
“Estados Unidos y Perú comparten casi 200 años de relación bilateral, y nuestro objetivo es seguir fortaleciendo esos lazos comerciales y generar oportunidades sostenibles para ambas economías”, manifestó.
Whitley explicó también que, si bien el objetivo actual de la USDA es reducir el déficit comercial negativo para EE.UU., esto no significa que nuevos productos peruanos no puedan ingresar al mercado de su país.
“Trabajamos estrechamente con el Gobierno del Perú para mantener un comercio abierto, justo y basado en evidencia científica, de forma que tanto EE.UU., como nuestros socios se beneficien. Fortalecer el comercio agrícola en ambas direcciones ayuda a nuestros agricultores, a nuestros consumidores y a nuestras economías”, apuntó.
El funcionario de la USDA también agregó que el gobierno actual de EE.UU. ve al Perú como un socio clave, especialmente por sus frutas y hortalizas, que ayudan a satisfacer la alta demanda estadounidense durante todo el año. Un factor que, de hecho, expertos también señalaron para sustentar un menor impacto de los aranceles recíprocos en la agroexportación peruana.
LEA TAMBIÉN: Cerca del 60% del gasto del Gobierno central de Perú es rígido y no podría “recortarse”
La lista de productos enteros que EE.UU. ofrece al Perú
Whitley remarcó que ven gran potencial en varias categorías de productos agrícolas estadounidenses que pueden complementar la producción peruana y satisfacer la creciente demanda del consumidor. Estos incluyen:
- Carnes de alta calidad, especialmente carne de res y cerdo, reconocidas por su consistencia y sabor.
- Etanol, para cumplir con los objetivos del Perú en materia de combustibles más limpios.
- Productos lácteos como quesos e ingredientes especiales para el procesamiento de alimentos.
- Snacks y alimentos envasados, que reflejan cambios en los hábitos de consumo y la demanda de conveniencia.
- Frutas frescas y nueces, particularmente manzanas, peras y almendras estadounidenses que pueden complementar la oferta local.
- Ingredientes para la industria alimentaria y de bebidas, incluyendo granos, endulzantes, nueces, aceites esenciales y productos especializados.

Licenciado en Comunicaciones con especialidad en Periodismo por la Pontificia Universidad Católica del Perú, donde escribió en el portal Somos Periodismo y la revista Impresión. Parte del equipo fundador del medio digital Sudaca. Desde 2020 cubre temas económicos, políticos y sociales.