
Cada nueva aprobación de retiros “extraordinarios” de los fondos de las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP) reabre el debate entre la liquidez inmediata y las consecuencias de largo plazo para el sistema previsional. Más allá de lo económico, este escenario ha impulsado a los trabajadores a fiscalizar con mayor atención sus cuentas y, en consecuencia, el cumplimiento de las obligaciones de los empleadores.
Este fenómeno no es menor si se considera que, de acuerdo con la Asociación de AFP, más de 8 millones de peruanos forman parte del sistema privado de pensiones, que exige aportes obligatorios equivalentes al 10% del salario más comisión y seguro, destinados a conformar un fondo propio para una vejez digna.
Sin embargo, Pilar Navarro, asociada de Laboral en Garrigues, explica que la pandemia marcó un quiebre: desde entonces se aprobaron siete retiros extraordinarios y se han presentado más de 20 proyectos adicionales. Y tras esta aprobación, se sumarían S/ 26,000 millones los S/ 141,000 millones ya retirados, es decir, el 83% de los fondos previos al COVID-19.
LEA TAMBIÉN: AFP: ¿Cómo sacarle provecho a tu fondo de pensiones si decides retirarlo?
“La tentación política de aprobar retiros extraordinarios y debilitar los fondos individuales son medidas que, en la práctica, deterioran la capacidad futura de los trabajadores de acceder a una pensión adecuada y comprometen la sostenibilidad del sistema en su conjunto”, advierte Navarro.
Agrega que, sin duda, este escenario impulsa a los trabajadores a revisar con mayor frecuencia sus cuentas previsionales y a mantenerse vigilantes del cumplimiento de las obligaciones de sus empleadores. En este sentido, señala algunas obligaciones que deben observar las empresas a fin de garantizar una adecuada gestión previsional y evitar contingencias significativas:
- Afiliación oportuna: las compañías deben registrar a cada colaborador en el sistema previsional desde el inicio de la relación laboral, asegurando que sus aportes se efectúen sin interrupciones y protegiendo la conformación de su fondo de pensiones a fin de evitar el pago retroactivo de aportes con intereses y recargos, además de exponerse a sanciones de Sunafil o demandas judiciales.
- Transparencia en la información: es indispensable consignar de manera clara y precisa en la boleta de pago los montos retenidos por concepto previsional, de modo que el trabajador cuente con información completa y verificada.
- Transferencia de aportes retenidos: los montos descontados deben ser trasladados puntualmente a la AFP correspondiente, garantizando que los recursos lleguen de manera íntegra y oportuna a la cuenta individual del trabajador.
- Baja oportuna en la planilla y AFP NET: al culminar la relación laboral, la empresa debe proceder con la baja del trabajador en los sistemas correspondientes dentro de los plazos establecidos, evitando la generación de aportes indebidos y resguardando tanto a la organización como al trabajador.
LEA TAMBIÉN: Retiro de AFP: conoce cómo será el procedimiento para el desembolso del dinero
Fiscalización y sanciones
La Superintendencia Nacional de Fiscalización Laboral (Sunafil) supervisa el cumplimiento salarial y previsional, y ante irregularidades las empresas pueden afrontar deudas con intereses, multas de hasta 100 UIT (en función al incumplimiento y el número de trabajadores afectados), reclamos judiciales e impacto en procesos de desvinculación.
“El incumplimiento no solo afecta el ahorro del trabajador, sino que también genera contingencias significativas para las organizaciones, incluso después de finalizada la relación laboral”, advierte la abogada.
“La omisión en el pago de aportes puede ser reclamada no solo como parte de la liquidación de beneficios sociales o en eventuales procesos judiciales iniciados por los trabajadores, sino también directamente por las propias AFP” precisó la abogada.
Mayor vigilancia en el contexto de retiros extraordinarios
Los retiros extraordinarios han incentivado a los trabajadores a revisar con mayor frecuencia sus cuentas previsionales, lo que incrementa la presión hacia las empresas para cumplir de manera estricta y transparente.
En este contexto, el incumplimiento previsional no solo compromete el futuro de los trabajadores, sino que también puede convertirse en un pasivo financiero y reputacional para las compañías.