Newmont Corp., el principal productor de oro del mundo, seguirá adelante con un plan para encontrar US$ 2,000 millones en efectivo, incluso a través de ventas de minas y desinversiones de proyectos, después de cerrar la mayor adquisición en la industria minera este año.
Newmont, con sede en Denver, cerró el lunes la adquisición de Newcrest Mining Ltd. por aproximadamente US$ 15,000 millones, poniendo fin a un esfuerzo de casi un año para comprar la minera aurífera australiana.
Ahora, una vez superados todos los obstáculos regulatorios, el director ejecutivo de Newmont, Tom Palmer, dice que la compañía combinada puede iniciar un proceso para vender minas y decidir qué proyectos de exploración priorizar durante los próximos dos años.
“Provendrá de una combinación de desinversiones de activos y reordenación de proyectos para asegurarnos de tener la asignación adecuada y constante de efectivo para la reinversión”, dijo Palmer en una entrevista.
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El mega acuerdo minero se produce en momentos en que los productores de oro enfrentan la perspectiva de un estancamiento de la producción, depósitos más difíciles de explotar y crecientes costos de los insumos.
La producción de lingotes de Newmont se ha estancado durante los últimos tres años y la compañía predijo que sin una adquisición importante su producción seguiría siendo la misma durante otra década.
A los problemas de la empresa este año se sumó una huelga de cuatro meses en su mina Peñasquito en México. La huelga obligó a Newmont a recortar sus previsiones y a registrar ganancias inferiores a las esperadas en el último trimestre.
Una maniobra común
Las mineras normalmente se deshacen de activos luego de fusiones y adquisiciones para generar efectivo y mantener sus carteras manejables. Después de la adquisición de Goldcorp Inc. por parte de Newmont en 2019, un acuerdo que catapultó a Newmont al primer puesto del sector del oro, la compañía vendió una mina y dos participaciones en otros proyectos durante el primer año.
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Con la adquisición de Newcrest, Newmont operará 20 minas en 11 países. La medida aumenta la producción de oro de la compañía a aproximadamente 8.5 millones de onzas al año, al tiempo que aumenta significativamente su exposición al cobre.
“Analizaremos la cartera que tenemos y nos tomaremos nuestro tiempo para integrarla de forma segura y daremos la bienvenida a nuevos colegas a nuestro negocio. Y luego pensaremos detenidamente cómo podríamos racionalizar nuestra cartera durante los próximos 12 a 24 meses para cumplir con ese compromiso de US$ 2,000 millones”, dijo Palmer.
Palmer dijo que la compañía aún no ha decidido qué activos vender, aunque la estrategia ha estado sujeta a especulaciones de la industria. Dos minas australianas adquiridas a Newcrest, Telfer y Havieron, se encuentran entre varias operaciones que los analistas han pronosticado que Newmont pondrá a la venta.
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