
El dictamen aprobado por la Comisión de Trabajo y Seguridad Social del Congreso de la República del Perú plantea modificar la Ley N° 32123, de Modernización del Sistema Peruano de Pensiones, con el objetivo de “reducir” las cargas previsionales que enfrentan los trabajadores con más de un empleo.
La propuesta gira en torno a un cambio central: que el aporte obligatorio al sistema previsional se realice únicamente por el empleo donde se percibe la remuneración más alta. El trabajador podrá decidir si desea aportar o no por los ingresos que recibe en los otros empleos.
Esta flexibilización responde -argumenta el texto- a la necesidad de aliviar la presión económica sobre los trabajadores que deben asumir doble carga previsional, lo cual, según la comisión dictaminadora, desincentiva la formalización del segundo empleo.
LEA TAMBIÉN: Trabajadores con reclamos ahora van directo a Sunafil, ¿qué pasa con canales de las empresas?
¿Qué ocurre hoy con los aportes en más de un empleo?
Actualmente, tanto en el Sistema Nacional de Pensiones (ONP) como en el Sistema Privado de Pensiones (AFP), los trabajadores están obligados a aportar por cada uno de sus empleos.
En el caso del ONP, el 13% de la remuneración va a un fondo común que financia las pensiones actuales; mientras que en el Sistema Privado de Pensiones (SPP), el 10% se destina a una cuenta individual, a lo que se suma la comisión y la prima de seguro.
De forma paralela, cada empleador debe aportar el 9% de la remuneración bruta del trabajador a EsSalud, lo que “genera una doble o triple contribución si se tienen varios empleos formales” a consideración de la propuesta.
LEA TAMBIÉN: ¿Mejorarán los derechos laborales de los papás en el Perú?
Un segundo empleo podría quedar exonerado en el SPP
Con la propuesta legislativa, el cambio más importante se concentra en el régimen privado de pensiones. En este caso, se permitiría que el trabajador no efectúe aportes obligatorios por sus empleos secundarios si estos le generan menores ingresos que el principal.
La tasa sería de 0% para esos empleos, con lo cual no se afectaría su fondo de pensiones individual si así lo decide.
Por otro lado, el dictamen mantiene la exigencia de aportes al Sistema Nacional de Pensiones, pero incorpora una modificación: si el trabajador tiene un segundo empleo, ese vínculo podrá considerarse como una unidad de aporte adicional para efectos del acceso al pilar semicontributivo, según lo previsto en la Ley 32123.
Esto puede favorecer que los afiliados lleguen más rápido a los años requeridos para obtener una pensión proporcional o mínima.
LEA TAMBIÉN: Arbitrios municipales: ¿Paga el propietario o inquilino? Lo que dice la ordenanza local
Un solo empleador asumiría el aporte a EsSalud
En cuanto al seguro de salud, la norma establece que el empleador que otorgue la mayor remuneración al trabajador será el responsable de realizar el aporte a EsSalud.
En los casos en que los ingresos sean iguales, la responsabilidad recaerá en el empleador más antiguo. Esto evitaría duplicidades en la cobertura de salud del trabajador y, al mismo tiempo, busca hacer más eficiente la asignación de este aporte.
Opiniones divididas sobre su viabilidad
Tanto el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) como el Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo (MTPE) emitieron opiniones técnicas sobre la propuesta.
El MEF señaló que el proyecto carece de un análisis de costo-beneficio que demuestre su sostenibilidad financiera, lo que podría suponer una infracción al artículo 79 de la Constitución al generar un gasto no previsto.
También advirtió que la medida podría afectar la acumulación de aportes y, por ende, la suficiencia de las pensiones futuras.
El MTPE, por su parte, mostró reparos frente a la posible afectación del equilibrio del Sistema Nacional de Pensiones y la sostenibilidad de EsSalud, pero precisó que la exoneración de aportes en el caso del SPP no implica gasto fiscal, dado que se trata de cuentas individuales.
LEA TAMBIÉN: Licencia por salud: ¿se puede despedir a un trabajador que miente para obtenerla?
Formalización del segundo empleo como objetivo principal
La Comisión de Trabajo defendió el dictamen señalando que su propósito principal es incentivar la formalización del segundo empleo, que actualmente, según datos del Banco Central de Reserva del Perú (BCRP), consignados en el texto, se ejerce en la informalidad en el 95% de los casos.
El estudio citado por el dictamen revela que el 18% de los peruanos tiene más de un empleo y que la mayoría lo hace para cubrir necesidades básicas ante la insuficiencia de ingresos del primer empleo.
El dictamen concluye que el peso de los aportes previsionales puede llevar a los trabajadores a mantener esos ingresos de forma informal, y que permitir una exoneración parcial —al menos en el caso del SPP— puede ser un incentivo para que los trabajadores registren formalmente su segundo empleo sin temor a una carga adicional.
LEA TAMBIÉN: Bonos para inspectores de Sunafil: esto dice la entidad sobre el proyecto que causa preocupación
¿Medida resolverá la informalidad?
Desde el sector legal, hay voces que cuestionan que la exoneración de aportes al sistema privado de pensiones por un segundo empleo logre el objetivo planteado: promover la formalización laboral.
Para María Eugenia Tamariz, abogada asociada del estudio Benites, Vargas & Ugaz, el dictamen aprobado parte de una idea errónea al asumir que retirar cargas sociales como el aporte previsional generará mayor formalidad. “Este es un problema de naturaleza estructural que tiene que ver más con el acceso a beneficios para empleadores y trabajadores, como innovación, tecnología o incentivos tributarios, más que con eliminar requisitos”, señala.
Tamariz advierte que este tipo de medidas, al reducir únicamente un costo previsional en el SPP, no elimina otras obligaciones formales como el pago de beneficios sociales o el registro en planilla, por lo que no constituye un incentivo suficiente para impulsar la formalización del segundo empleo. Como ejemplo positivo, menciona el régimen de deducción de impuestos aplicable a los empleadores de trabajadores del hogar, donde sí existe una compensación directa para quienes formalizan.
Una crítica similar fue planteada por Germán Lora, socio de Damma Legal Advisors, quien sostuvo que la informalidad no depende del trabajador sino del empleador. “Supuestamente me voy a formalizar porque no me van a descontar AFP, pero eso no tiene lógica. La informalidad de un empleo no pasa por el trabajador, pasa por el empleador”, afirmó.
LEA TAMBIÉN: Más de 75,000 fiscalizaciones: Sunafil prioriza atención en sectores con mayor incumplimiento laboral
Posibles efectos adversos sobre el sistema de pensiones
Finalmente, Tamariz advierte que esta medida también podría tener implicancias estructurales para la sostenibilidad del Sistema Nacional de Pensiones (SNP). Al permitir que un trabajador con dos empleos evite aportar por uno de ellos, se genera un desincentivo a la afiliación y el aporte continuo, lo que a largo plazo podría agravar los problemas de financiamiento que ya enfrenta el SNP.
“En el contexto actual, muchos trabajadores prefieren mayor liquidez mensual que ahorrar para una pensión futura, especialmente ante la baja popularidad de ambos sistemas previsionales”, explica.
Además, teme que esta flexibilidad favorezca la migración hacia el sistema privado, debilitando el principio de solidaridad que sostiene al SNP, cuyas pensiones ya requieren el respaldo del erario público.
LEA TAMBIÉN: Reducción salarial: ¿Cuándo es válida sin consentimiento escrito del trabajador?