
La revolución tecnológica avanza a paso firme y tiene un nombre claro en la cúspide de la innovación: la inteligencia artificial. De acuerdo con el último informe Technology Trends Outlook 2025 de McKinsey & Company, la IA encabeza un grupo de 13 tecnologías emergentes que están transformando radicalmente la arquitectura de los negocios a nivel global.
Solo en el 2024, las inversiones en esta tecnología superaron los US$ 124,000 millones, consolidándose como el eje central del cambio empresarial en plena era digital.
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El informe subraya que esta transformación ya no es una posibilidad futura, sino una urgencia presente. Las empresas están rediseñando sus estructuras digitales para ganar eficiencia, escalar operaciones y mantenerse competitivas.
Aunque el 78% de las organizaciones ya ha incorporado IA en alguna función, apenas el 1% ha alcanzado una adopción madura, lo que abre un amplio margen de crecimiento.
“La inteligencia artificial no se limitará a automatizar tareas, sino que redefinirá profundamente la forma en que trabajamos”, señala Lareina Yee, socia senior de McKinsey.
“Las organizaciones que logren integrar eficazmente la colaboración entre humanos y agentes de IA estarán en una posición privilegiada para acelerar sus procesos y generar impacto estratégico”, agregó.
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Tres bloques que delinean el futuro
McKinsey organiza las tecnologías disruptivas en tres grupos estratégicos:
1. Revolución de la inteligencia artificial
- Agentic AI: La creación de “agentes autónomos” que pueden razonar, planificar y ejecutar tareas complejas ha crecido un 985% en demanda de talento en solo un año. En 2024, esta tendencia atrajo US$ 1.1 mil millones en inversiones.
- IA General: Con un crecimiento del 35% respecto a 2023, la IA está expandiéndose velozmente, pero su aplicación aún está en etapa de maduración en la mayoría de organizaciones.
2. Fronteras del cómputo y conectividad
- Conectividad avanzada: Las conexiones 5G llegaron a 2,250 millones en 2025, impulsando nuevas aplicaciones industriales gracias a tecnologías como el slicing de red.
- Cloud y Edge Computing: US$ 80.8 mil millones se invirtieron en estas plataformas en 2024. Empresas como AWS y Google lideran con chips personalizados para tareas específicas.
- Realidad inmersiva: El mercado AR/VR creció un 10%, con mayor integración entre hardware y IA generativa.
- Ciberseguridad y confianza digital: Las inversiones alcanzaron US$ 77.8 mil millones, en respuesta a la necesidad de proteger datos y operaciones críticas.
- Tecnología cuántica: Aunque aún experimental, ya ha captado US$ 2 mil millones en inversión y registra un crecimiento del 7% en patentes.
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3. Ingeniería de vanguardia
- Chips especializados: La demanda de semiconductores optimizados para IA elevó la inversión a US$ 7.5 mil millones, con mejoras en rendimiento y eficiencia energética.
- Movilidad del futuro: Las ventas de vehículos eléctricos crecieron 36% en China, y los viajes autónomos de Waymo se multiplicaron por 25 en un año.
- Bioingeniería: Avances como CRISPR permitieron aprobar la primera terapia genética en EE.UU., mientras surgen proteínas animales sin animales.
- Tecnología espacial: SpaceX lidera con lanzamientos a menor costo y más de 7,000 satélites Starlink en órbita.
- Robótica avanzada: Robots colaborativos y humanoides como Tesla Optimus están abriéndose paso en industrias y hogares.
- Sostenibilidad energética: Las tecnologías limpias alcanzaron US$ 223.2 mil millones en inversiones. China domina el 60% de la capacidad global de producción de electrolizadores.
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El desafío de escalar
Pese al auge inversor, la verdadera brecha está en la implementación. El informe recalca que las organizaciones que logren pasar de pilotos aislados a una integración transversal y estratégica de estas tecnologías estarán en mejor posición para afrontar el futuro.
McKinsey & Company proyecta que la velocidad de adopción marcará la diferencia entre quienes lideran y quienes quedan rezagados en esta nueva revolución industrial.