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Si bien la tasa de desempleo en Lima Metropolitana está lejos de los “picos” alcanzados en el primer año de pandemia (por encima del 16% en el 2020), en los últimos tres meses contados a agosto se ubicó en 7.3%, según el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI).
La “sorpresa” es que tras cuatro trimestres móviles de desacelerarse o estancarse, ahora revirtió la tendencia. Con ello, se tiene que, en valores absolutos, ahora hay 396,300 personas buscando activamente empleo. Para aterrizar dicha cifra, se debe considerar que en los dos trimestres móviles previos, el número de desocupados estaba en alrededor de 370,000 limeños.
¿Qué sucedió? Para Miguel Jaramillo, investigador principal de Grade, hay que tener en cuenta dos factores: uno es la desaceleración de la economia peruana (creció solo 1.41% en julio); y el otro es que la fuerza laboral “ha vuelto” del todo.
Refirió que durante el inicio de la pandemia cayó la población económicamente activa (PEA), mientras que se elevó la población inactiva (que no tiene empleo, pero no busca uno).
Estos factores podrían haber explicado el incremento de la tasa de desempleo. Sin embargo, enfatizó que hacia adelante no se esperan variaciones importantes en dicha tasa. Más bien preocupa que estos desempleados sean absorbidos en puestos de trabajo informales, dijo.
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“Me preocupa la calidad del empleo. Si revisamos la data de empleo adecuado (2.9 millones) entre junio y agosto de este año, estamos 10% por debajo de lo registrado hace tres años. Entonces, claramente la calidad de los empleos se ha deteriorado y la caída ha sido más fuerte en la mano de obra asalariada”, afirmó.
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Por su parte, Víctor Fuentes, economista jefe del del Instituto Peruano de Economía (IPE), manifestó que aunque aún no es muy claro el porqué del cambio de dirección, una de las razones podría estar vinculada a la expansión de la oferta laboral.
Por ejemplo, consideró que con el retorno a la presencialidad de las clases escolares, quienes estaban encargados del cuidado de los niños ahora pueden salir en búsqueda de un puesto de trabajo. Aún así, señaló que se debe esperar para conocer si este será un driver (impulsor) que amerite mayor análisis en el futuro.
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La data de desempleo
Si bien la data muestra que hay 396,300 limeños que no cuentan con un puesto de trabajo, pero están en busca de uno, las mujeres son -en buena cuenta- quienes “encabezan” el desempleo. La tasa de desempleo de las féminas se ubicó en 8.9%, mientras que la de los hombres, en 6%.
En valores absolutos, entre junio y agosto se registraron 221,800 mujeres desocupadas, mientras que los hombres en tal condición fueron 174,500. En ambos casos, son cifras superiores en 34.4% y 24.5%, respectivamente, comparadas con la prepandemia.
