La Inteligencia Artificial (IA) ha revolucionado el espectro laboral y la Generación Z —nacidos entre los finales de los años noventa e inicios del 2000— ha tenido que iniciar su vida laboral en medio de los cambios tecnológicos.
De acuerdo con un estudio de EY, el 58% de los centennials reconoce que incrementará el uso de la IA para sus actividades laborales, debido a las ventajas que representa para ahorrar tiempo (58%), su capacidad para analizar grandes volúmenes de datos (53%) y para reducir errores (41%).
No obstante, si bien más de la mitad acudirá a la IA para trabajar, un 43% teme que esta tecnología elevará el desempleo y reducirá la capacidad de aprendizaje y creatividad.
Otro 39% se muestra preocupado por la generación de información falsa. En este punto, revelan que la ética ocupa un “lugar bastante bajo” en la lista de prioridades de habilidades de cara a la IA.
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Al respecto, Marcie Merriman, líder global de Perspectivas Culturales y Estrategia del Cliente de EY, sostiene que la Generación Z alcanzó la mayoría de edad en un mundo donde la productividad y la eficiencia se intensifican constantemente gracias a las tecnologías que se han integrado en su vida diaria desde que nacieron.
Por ello, la “adopción acelerada de la IA produce nuevos constructos y redefine la confianza”. “Si bien la Generación Z puede ser la que más teme a la IA como competidor, también será uno de los mayores benefactores a medida que la IA guíe un futuro nuevo y más rápido”, indicó.
¿Qué valoran los centennials de la IA?
El reporte de EY precisa que los centennials comúnmente usan la Inteligencia Artificial para traducir idiomas en tiempo real, identificar patrones en grandes cantidades de datos y editar fotos; no obstante, existe cierta “desconexión” en las habilidades para emplearla correctamente.
Las habilidades más importantes para utilizar bien la IA son: creatividad, curiosidad, pensamiento crítico, codificación y programación de computadoras, así como escritura.
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Desde la óptica de los educadores, advierten que los estudiantes aún “no son muy buenos” para hacer preguntas a la IA en pos de respuestas significativas.
“No se trata solo de cómo interactúan con la IA, sino de sus habilidades metacognitivas para comprender cómo hacer buenas preguntas y lo que saben, pero resulta que es una habilidad realmente importante para interactuar con la IA”, dijo la directora de Aprendizaje de Khan Academy, Kristen Eignor DiCerbo.
