
Los proyectos bajo Asociación Público Privada (APP) habían perdido brillo; tal es así que este mecanismo pasó a segundo plano y tomó mayor protagonismo el llamado Gobierno a Gobierno (G2G), que en buena cuenta es obra pública. Sin embargo, en los últimos dos años, se ha visto un “resurgir”.
Si se toma la data del Informe de Proyecciones Macroeconómicas del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), en el 2024 el valor adjudicado dio un salto sustancial comparado con 2023. En los siguientes años, se espera mantener el ritmo, y sumar más proyectos.

En este contexto, Gestión conversó con José Luis Guasch, experto internacional en Asociaciones Público Privadas, quien además fue jefe del Grupo de Expertos Globales en APP del Banco Mundial.
Guasch reconoce que Perú enfrenta una gran brecha de infraestructura, que ya distintos analistas y entidades han estimado podría cerrarse en 20 o 40 años, según los recursos que se destinen a obras. Es justamente por esta razón, apunta, que las APP se han vuelto un mecanismo clave.
Sin embargo, mencionó que hay que aterrizar mejor las metas. A su consideración, será complejo que Perú pueda adjudicar casi 80 proyectos entre 2025 y 2026.
“Me parecería extraordinario si lo hicieran, pero para mí no tiene credibilidad (esta meta). El ejemplo que siempre doy es que no conozco ningún país emergente que haya sido capaz de adjudicar más de 25 APP por año. Entonces, 15 o 20 ya es un éxito relativo. Pero, 40 por año, lo veo muy complicado y muy difícil que sea creíble”, cuestionó.
Si bien reconoció el trabajo reciente de ProInversión, sobre todo durante la gestión de José Salardi, consideró que todavía hay retos que superar vinculados a la estructuración de proyectos y, sobre todo, a los tiempos de los procesos.

Mejorar los indicadores para medir el éxito de las APP en Perú
Además, remarcó que Perú podría valerse de mejores métricas para mostrar el éxito de las APP, lo que le permitiría poner más esfuerzo no solo en la adjudicación sino en la entrega del proyecto terminado.
“La primera métrica es la cartera de proyectos y muestran unas listas napoleónicas. Tienen 50, 60 o 70 proyectos. Entiendo la razón, de esta forma se le da ‘un poco de miel’ a los posibles candidatos a invertir. Pero, ¿cuántos de estos proyectos se aplazan o se caen? La segunda métrica más común que se usa es el número de proyectos adjudicados. Este es un poco más razonable, pero imperfecta y engañosa", cuestionó.
Ante lo expuesto, Guasch considera que se debe sumar el número de APP que entra en operación por año. “Al final, esta es la realidad. Para qué quiero decir que tienes proyectos adjudicados cuando lo que la gente quiere es el servicio”, remarcó. Este indicador resulta más palpable tomando en cuenta, dijo, que cuando se adjudica un proyecto, este puede sufrir trabas.
“Los proyectos adjudicados tienen algunos problemas, no solo en Perú, sino también en otras partes. Demoras en el cierre financiero, predios que no se liberan, financiamiento, estructura del diseño, ingeniería”, explicó.
Aún con ello, Guasch cree que con una reforma de las APP que se encamine en la dirección correcta, este mecanismo es el que debe primar, incluso por encima del G2G.
Para él, en línea con lo que había dicho Salardi cuando ocupó el MEF, es que los acuerdos Estado a Estado deben tomarse solo en casos excepcionales, como lo fue en su momento los Juegos Panamericanos 2019.