Las empresas de Perú o de otro país de la región que se adapten serán líderes. Aquellas que esperen, se preguntarán qué fue lo que pasaron por alto.
Las empresas de Perú o de otro país de la región que se adapten serán líderes. Aquellas que esperen, se preguntarán qué fue lo que pasaron por alto.
Harvard Business  Review

El hipercompetitivo panorama interno de actúa como un campo de pruebas en el que la iteración de productos es implacable, las expectativas de los consumidores son altísimas y solo sobreviven los más aptos. ¿El resultado? Cuando estas empresas se expanden internacionalmente, ya son de clase mundial y están diseñadas para atraer a que buscan valor y precios competitivos.

Entonces, ¿cuál es la mejor estrategia para tener éxito en este entorno nuevo y en constante cambio? Le recomiendo seguir estos cinco pasos:

1. Hacer un seguimiento de la competencia donde realmente se encuentra

Demasiadas aún centran su atención únicamente en los competidores de América del Norte, Europa y Japón. Sin embargo, muchas de las firmas más competitivas en la actualidad no están priorizando la expansión en Occidente, sino que están escalando rápidamente en el sudeste asiático, América Latina, Medio Oriente y África. Para cuando estas compañías lleguen a los mercados occidentales, es posible que ya sean gigantes globales. ¿Quién es el responsable en su empresa de monitorear a los actores clave en China, Indonesia, Brasil o Nigeria? Si la respuesta es nadie, ya está en desventaja.

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2. Considerar a China como un campo de pruebas para productos, no solo como un mercado para ellos

Los productos más competitivos en China no solo están sobreviviendo, sino que están siendo probados en uno de los mercados de consumo más exigentes del mundo. Los mejores de ellos ya están prosperando a nivel global. Sin embargo, muchas empresas internacionales aún no estudian el ciclo dede productos en China. Se enfocan en competir en el país, pero ignoran las estrategias que están haciendo que las empresas chinas sean competitivas fuera de él. Comprender cómo estas compañías triunfan en precio, velocidad y características puede servir como modelo para competir a nivel mundial.

3. Convertir los equipos con sede en China en una ventaja competitiva

Para las empresas que tienen equipos en China, sus ejecutivos locales deben ser un activo de inteligencia incorporado en la estrategia de innovación de productos, no solo un equipo de ventas, marketing o ingeniería que desarrolle lo que la sede central ya ha decidido. Con demasiada frecuencia, no se incentiva a los empleados con sede en China para que realicen un seguimiento de la competencia local e informen sobre ella, de manera que se dé forma a la estrategia global. Las empresas deben estructurar sus funciones de forma proactiva para cerrar esta brecha. El seguimiento de la competencia no debe quedar en manos de iniciativas individuales, sino que debe ser una función formal del negocio, con información que fluya directamente hacia los responsables de la toma de decisiones en la sede central.

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4. Establecer un sistema para seguir la innovación China, incluso si no tiene presencia en el país

Los ejecutivos sin presencia en China aún necesitan acceso a información en tiempo real. Esto no se consigue con visitas ocasionales en las que los ejecutivos se reúnen con una lista seleccionada de proveedores y socios. Las empresas necesitan canalizar la innovación de manera estructurada, colaborando con firmas de inteligencia externas, participando en intercambios ejecutivos de aprendizaje y desarrollando sistemas de monitoreo específicos que identifiquen tendencias antes de que los competidores escalen a nivel mundial.

5. Desafiar las suposiciones obsoletas

Muchas empresas todavía operan con una mentalidad de la década de 2010 respecto a China, asumiendo que es un mercado imitador o que las barreras regulatorias limitan su potencial global. Sin embargo, en industrias como los , la farmacéutica, la y los semiconductores, las empresas chinas no solo están alcanzando a la competencia, sino que están estableciendo estándares globales. Los ejecutivos deberían hacerse estas preguntas clave: ¿Qué suposiciones sobre China están moldeando nuestra estrategia? ¿Nos están ayudando o frenando? ¿Estamos estructurados para detectar a tiempo a los competidores globales, o solo cuando ya es demasiado tarde?

Los innovadores chinos están transformando el panorama global de la innovación de productos a un ritmo que la mayoría de las empresas no logra seguir. Muchos de los próximos líderes del mercado están surgiendo en lugares que las sedes occidentales suelen pasar por alto. Las empresas que se adapten serán líderes. Aquellas que esperen, se preguntarán qué fue lo que pasaron por alto.

*Por: Zak Dychtwald, es el fundador y director ejecutivo de YCG BridgeWorks

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