
¿Hacia dónde se dirige la presencia de Microsoft en Perú? La multinacional ingresó al país en 1992 a través de dos distribuidores, pero recién en 1994 estableció su propia oficina local. Desde entonces han transcurrido 31 años, siendo los últimos cinco un período de notable crecimiento: su facturación se cuadruplicó.
En esta entrevista, el gerente general de la compañía, Mario Rodríguez, adelantó los planes que Microsoft tiene en marcha relacionados con la inteligencia artificial. Más allá de soluciones como ChatGPT o Copilot, ¿qué novedades podemos esperar en el corto plazo?
“Nuestra historia reciente en el segmento Enterprise Business ha sido muy positiva: en los últimos cinco años hemos multiplicado por cuatro nuestra facturación en Perú. Y dentro de ese crecimiento, el área de nube —específicamente nuestra solución Azure— ha tenido un desempeño aún más destacado, con un crecimiento de seis veces”, dijo.
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¿Qué impulsó ese resultado?
Desde nuestro lado, creo que fue clave haber hecho una buena segmentación del mercado y enfocarnos en clientes muy específicos, con una aproximación profunda a su negocio. Es decir, realmente entender cómo operan, cuáles son sus KPIs, cómo se alinean con sus objetivos estratégicos y qué impacto tienen nuestras soluciones en sus resultados concretos.
Además, el contexto del país también ha jugado a favor. La adopción de la digitalización en Perú ha sido fuerte en los últimos años. Un ejemplo claro es el avance en bancarización. Tradicionalmente se movía entre el 20% y 30%, pero hoy estamos en torno al 50%. Y ese salto ocurrió justamente en este último quinquenio. Un vehículo tangible de ese cambio es Yape.
¿Fue lo único?
No, hubo más factores. Por ejemplo, la educación digital. Durante la pandemia se volvió una necesidad, pero no desapareció con el regreso a la presencialidad: llegó para quedarse. Hoy, ya no se trata solo de asistir a una clase física o virtual, sino de un modelo híbrido que ha venido acompañado por el desarrollo de nuevas habilidades y una mejora en el nivel de conocimiento de las personas.
Eso también explica parte del crecimiento. Hay muchas otras variables, pero trato de resumir lo esencial: estuvimos en el momento correcto, en el lugar correcto, con la solución adecuada. Y ese enfoque, centrado en entender y responder a las necesidades reales del mercado, fue clave para lograr los resultados que vemos hoy.
De cara a los próximo años, ¿cual es la expectativa de Microsoft Perú?
Nuestra meta es ambiciosa: en los próximos tres años esperamos duplicar nuestra facturación. Sí, puede sonar desafiante, pero creemos que es un objetivo alcanzable.
Nosotros trabajamos con años fiscales que van de julio a junio. De hecho, estamos a solo 19 días de cerrar el año fiscal actual. Así que, cuando hablamos de este objetivo, nos referimos al año fiscal 2028, que irá desde julio de 2028 hasta junio de 2029. En términos simples: si este año facturamos uno, en tres años queremos facturar dos. Esa es la meta concreta que nos hemos trazado.
¿Cuáles serán los palancas que impulsarán ese crecimiento?
La piedra angular para lograrlo, y para que no se quede solo en una declaración aspiracional, son los acuerdos de largo plazo que hemos firmado recientemente. Estos nos permiten estar alineados estratégicamente con nuestros clientes y sostener el ritmo de crecimiento que proyectamos.
Un ejemplo muy conocido es el acuerdo con el BCP, anunciado en 2024, que aunque es reciente, entra dentro de nuestro actual año fiscal —porque, como mencioné, nuestro año va de julio a junio. Este tipo de alianzas nos permite contar con ingresos sostenibles en el tiempo, lo que fortalece nuestra posición financiera y nos da la solidez necesaria para plantear metas de ese calibre.
Además del acuerdo con BCP, ¿qué otros negocios permitirán alcanzar esta meta?
Te lo puedo decir con ciertas reservas, porque tenemos contratos con cláusulas de confidencialidad que debemos respetar. Pero lo que sí te puedo adelantar es que se trata de acuerdos importantes con empresas del sector privado, en rubros como la banca, la manufactura y grupos empresariales diversificados.
¿Y estos negocios están ligados a qué tipo de soluciones? ¿a la nube?
Sí, están fuertemente vinculados a soluciones en la nube, pero no solo eso. También incluyen componentes muy potentes de analítica de datos, inteligencia artificial y, cada vez más, de ciberseguridad que hoy en día está profundamente integrada con la nube.
Son negocios firmados a largo plazo, hablamos de compromisos de cinco años. Por eso puedo decir con confianza que en tres años vamos a duplicar nuestra facturación: ya tenemos el pipeline cerrado y firmado. Ahora lo que nos queda es ejecutar.
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Perú y su avance en el uso de la IA
¿Las empresas peruanas ya están utilizando soluciones de inteligencia artificial?
En términos de adopción tecnológica, sectores como salud, manufactura y finanzas han liderado el camino, con un crecimiento del 25% solo en el último año.
Te doy algunos datos concretos: el 51% de las organizaciones peruanas ha implementado proyectos de inteligencia artificial en los últimos seis meses. Proyectos de todo tipo, tamaño y alcance. Además, el 70% de las empresas planea aumentar su presupuesto en soluciones de IA en los próximos dos años. Eso demuestra que no es una moda, sino una tendencia sólida y en expansión.
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¿Qué sectores están a la vanguardia en esta adopción?
El sector financiero y el retail están bastante avanzados. Están utilizando inteligencia artificial para personalizar servicios, mejorar la experiencia del cliente y optimizar sus procesos de negocio. Al final del día, lo que buscan las empresas es generar eficiencia, reducir costos, aumentar ingresos y —si se logra todo eso al mismo tiempo— maximizar la utilidad. Ese es el objetivo final.
¿Y la inteligencia artificial también se está aplicando en otros ámbitos?
Sí, tenemos varios proyectos vinculados a educación, salud y sostenibilidad.
¿Qué otros sectores tienen potencial para implementar la IA?
Varios, sin duda. Uno clave es la educación. Es un sector con muchísimo potencial, porque la IA puede transformar la manera en que enseñamos y aprendemos. Luego está la manufactura, donde la aplicación de inteligencia artificial puede optimizar procesos a todo nivel.
Y cuando hablo de manufactura, me refiero a una gama muy amplia: desde quienes producen bienes de consumo masivo, hasta aquellos que convierten materia prima en productos terminados, como ocurre en industrias como la minería o la pesca. También destacaría el sector de telecomunicaciones. Es una industria que emplea a muchas personas, y que ya viene incorporando tecnología como un diferenciador , no solo para mejorar su operación, sino para crear nuevas propuestas de valor.
¿Estos cambios ya están ocurriendo? ¿O aún los veremos a más largo plazo?
Todo esto ya está ocurriendo, de forma gradual pero constante. Mientras hablamos, siguen apareciendo nuevos casos de uso.
Y cuando digo casos de uso, me refiero a aplicaciones reales y específicas de la inteligencia artificial en distintos procesos de negocio. Es curioso, porque antes ese término era algo muy técnico, típico de los que trabajamos en tecnología. Pero hoy en día, hablas con cualquier CEO y ya te habla de casos de uso con total naturalidad.

Microsoft y sus 31 años en Perú
¿Cómo resume Microsoft su trayectoria en Perú?
Este año cumplimos 31 años en Perú y 50 en el mundo. En ese tiempo, hemos sido testigos de una transformación profunda. Al inicio, nuestro propósito era muy claro y centrado en el producto: un Windows y un Office en cada PC del planeta. Funcionó por décadas, pero era un enfoque de adentro hacia afuera.
¿Y eso cambió?
Sí, hace diez años redefinimos nuestro propósito: empoderar a las personas y a las organizaciones para que logren más. Es un enfoque completamente distinto, más conectado con las necesidades del mercado, de los clientes y de la sociedad. Ya no se trata solo de lo que hacemos, sino del impacto que generamos.
Este cambio de mindset ha tenido un efecto enorme. A nivel global, Microsoft ha crecido exponencialmente en los últimos diez años. Eso se refleja en los resultados financieros, en la capitalización bursátil, y también en cómo nuestras soluciones hoy están más centradas en generar valor real, especialmente con IA y datos.
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¿Qué destacarías como el mayor aporte de Microsoft en este tiempo?
Sin duda, el impacto en las personas. Nuestro enfoque ha sido generar conocimiento y capacidades. Hablamos de skilling, de entrenar y empoderar a millones de personas —incluso de forma gratuita— con herramientas como LinkedIn Learning, donde no solo enseñamos tecnología, sino también habilidades blandas, gerenciales y de liderazgo.
Si tuviera que quedarme con una palabra para resumir nuestro impacto, sería conocimiento. Ese ha sido nuestro mayor aporte a Perú y al mundo.

Licenciada en Periodismo por la Universidad Jaime Bausate y Meza con 20 años de experiencia profesional. Laboró en medios de comunicación como TV Perú y Perú21. También ejerció en gremios como la SNMPE y SNI. Desde el 2016, es parte del diario Gestión.