
Lo que significa enviar dinero a familias en el extranjero podría experimentar un cambio radical. Esta posibilidad, surgida de un proyecto de ley aprobado recientemente por la Cámara de Representantes de EE.UU. bajo la iniciativa del presidente Donald Trump, ha provocado, y con razón, una mezcla de preocupación y frustración entre la gente esta semana.
Lo que se viene es un posible impuesto a las remesas, algo que afecta directamente a millones de migrantes que mes a mes hacen un esfuerzo por ayudar a los suyos desde los Estados Unidos. Es obvio lo mucho que puede significar cada dólar que se manda. Por eso, me parece clave explicar bien de qué va todo esto y cómo podría impactarte a ti o a alguien cercano.

¿CUÁNTO SERÍA EL IMPUESTO A LAS REMESAS?
Este proyecto, llamado irónicamente el “Gran y Hermoso Proyecto de Ley”, fue aprobado en la Cámara por un margen súper ajustado: 215 votos a favor contra 214 en contra. Lo más importante que debes saber es que la versión más reciente incluye un impuesto del 3,5% sobre el monto total de las remesas enviadas desde Estados Unidos al extranjero.
Para que lo veas más claro: si tú mandas US$100 a tu familia en México, El Salvador o cualquier otro país, ahora tendrías que pagar US$103,50 por esa transferencia. El impuesto, que inicialmente iba a ser del 5%, fue reducido luego de varias negociaciones dentro del Congreso.
¿A QUIÉNES AFECTARÍA ESTA MEDIDA?
Esto es lo que más revuelo ha causado entre nuestras comunidades. El impuesto no se aplicaría a ciudadanos estadounidenses ni a quienes tienen residencia permanente (Green Card). Pero sí impactaría directamente a:
- Inmigrantes indocumentados.
- Titulares de visas laborales temporales, como las H-1B, H-2A y H-2B.
- Personas con Estatus de Protección Temporal (TPS).
Es decir, una buena parte de quienes trabajan duro en sectores como la agricultura, la construcción o los servicios, y que ya enfrentan muchas barreras económicas, podrían ser los más golpeados.

¿QUÉ BUSCA EL PROYECTO FISCAL DE TRUMP?
Este megaproyecto de ley es parte de una reforma más grande que Donald Trump quiere implementar en su regreso a la política. Además del impuesto a las remesas, la propuesta incluye recortes importantes a programas sociales, como Medicaid, que ya de por sí son limitados para muchos migrantes.
También destina US$46,5 millones adicionales para la construcción del muro fronterizo con México, dentro de un presupuesto total de US$147 mil millones para seguridad interna. Claramente, esto va en línea con las promesas de campaña del exmandatario sobre endurecer la política migratoria y acelerar las deportaciones.
¿QUÉ IMPACTO TENDRÍA ESTE IMPUESTO EN LAS REMESAS?
Los datos del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) hablan por sí solos. En 2024, las remesas hacia América Latina y el Caribe alcanzaron un récord histórico de US$161 mil millones, y de ese total, México recibió US$65 mil millones solo desde Estados Unidos.
Imagínate entonces el efecto que tendría un impuesto del 3,5% sobre ese volumen de dinero. Estamos hablando de una posible pérdida de miles de millones de dólares al año para las familias en nuestros países. Y eso, sin contar con que muchos migrantes ya pagan altas tarifas por usar ciertos servicios de envío.
¿QUÉ SIGUE AHORA?
Aunque la Cámara de Representantes ya dio luz verde, el proyecto aún debe ser aprobado por el Senado. Y como ya sabemos, ahí puede haber más resistencias o cambios. Por eso es tan importante mantenerse informado y, si tienes la oportunidad, comunicarte con organizaciones que defienden los derechos de los migrantes o incluso con tus representantes locales.