A pesar de la sabida preferencia del presidente Donald Trump a la comida rápida y refrescos, desde la Casa Blanca aseguran que se encuentra “en perfectas condiciones para ejercer” sus funciones.
Sean Barbarella, doctor de la Casa Blanca, indicó que Trump se mantiene “en excelente estado de salud, mostrando unas funciones cardíacas, pulmonar, neurológica y físicas en general robustas”, luego de realizarle su examen médico anual.
Además, la evaluación neurológica al presidente de Estados Unidos —que se acerca a los 79 años— “no reveló anomalías en su estado mental".
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Es menester precisar que Donald Trump ha llevado tratamientos por colesterol elevado, daños en la piel por su exposición frecuente al sol, alergias estacionales, un pólipo benigno y diverticulosis; una inflamación o infección del tracto digestivo.
A la fecha, Trump pesa 102 kilos y mide 1,90 metros y tiene “todas sus vacunas al día” pero no especificaron cuáles.
Y, tras el intento de homicidio que padeció durante su campaña electoral en Pensilvania, el doctor Barbarella anotó que no hay estragos en su capacidad auditiva.
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El presidente Trump asegura no beber licor ni fumar y apenas duerme cinco horas al día. En más de una ocasión, ha criticado a su antecesor Joe Biden (81 años) por no tener la capacidad de dirigir a Estados Unidos.
Con información de EFE
