Una sala de juegos para niños en el albergue para migrantes, a donde acudían maestros enviados por UNICEF dos veces por semana, en Ciudad Juárez. Foto: Bloomberg
Una sala de juegos para niños en el albergue para migrantes, a donde acudían maestros enviados por UNICEF dos veces por semana, en Ciudad Juárez. Foto: Bloomberg
Agencia Bloomberg

Las maestras de kinder no volvieron a los salones de clase. El médico no regresó más al hospital. De la noche a la mañana, los recursos que el pastor Francisco González Palacios ofrecía en su albergue para migrantes desaparecieron.

Estimado(a) lector(a)

En Gestión, valoramos profundamente la labor periodística que realizamos para mantenerlos informados. Por ello, les recordamos que no está permitido, reproducir, comercializar, distribuir, copiar total o parcialmente los contenidos que publicamos en nuestra web, sin autorizacion previa y expresa de Empresa Editora El Comercio S.A.

En su lugar, los invitamos a compartir el enlace de nuestras publicaciones, para que más personas puedan acceder a información veraz y de calidad directamente desde nuestra fuente oficial.

Asimismo, pueden suscribirse y disfrutar de todo el contenido exclusivo que elaboramos para Uds.

Gracias por ayudarnos a proteger y valorar este esfuerzo.