El anuncio de Donald Trump de que Estados Unidos incluirá tres tokens digitales menos conocidos en su reserva estratégica de criptomonedas fue recibido con escepticismo en la industria, y los inversores cuestionaron los méritos del proyecto y las monedas que seleccionó renunciaron a algunas de sus ganancias iniciales.
Trump dijo el domingo en Truth Social que los tokens XRP, SOL y ADA se incluirán en la reserva, junto con Bitcoin y Ether. La noticia provocó un repunte criptográfico inmediato, ofreciendo alivio a una clase de activos que acababa de su peor mes desde 2022.
Sin embargo, la euforia inicial pronto dio paso a preguntas sobre todo, desde la viabilidad del plan de Trump hasta las motivaciones detrás de él. Los mercados de criptomonedas volvieron a estar en números rojos el lunes, y XRP, SOL y ADA sufrieron cada uno caídas intradía de más del 10% después de dispararse el día anterior. Bitcoin y Ether también cayeron.
La caída de las criptomonedas en febrero había presionado a Trump, quien regresó a la Casa Blanca después de que la industria lo colmara de donaciones y elogios de campaña. Ni siquiera la reversión por parte de la Comisión de Bolsa y Valores de una ofensiva que duró años había logrado detener la venta masiva, que muchos atribuyeron en parte al nerviosismo por los aranceles comerciales de Trump y las medidas dramáticas para desmantelar los programas gubernamentales.
“Para un presidente que prospera siendo el héroe del mercado, el desempeño de los activos de riesgo de la semana pasada fue todo menos inspirador”, dijo QCP Capital en una nota el lunes. “El cálculo político fue claro: Trump necesitaba una victoria antes de que sus índices de aprobación comenzaran a caer, una métrica que probablemente se toma muy personalmente”.
Impulso Trump | XRP, SOL y ADA subieron tras la publicación de Trump
XRP cayó un 11% a las 10:05 a.m. en Nueva York, mientras que SOL cayó un 18% y ADA cayó casi un 10%. Bitcoin bajó aproximadamente un 5%, cotizando nuevamente por debajo de los US$ 90,000, mientras que Ether perdió casi un 10%.
En su primera declaración sobre la creación de una reserva de criptomonedas en enero, la Casa Blanca dijo que tal reserva se derivaría “potencialmente de criptomonedas incautadas legalmente por el Gobierno Federal a través de sus esfuerzos de aplicación de la ley”. Bitcoin suele ser la principal criptomoneda incautada por las fuerzas del orden, incluida la redada del famoso sitio web Silk Road.
El anuncio inicial contenía pocos detalles sobre cómo se crearía la reserva, lo que decepcionó a los inversores y ayudó a preparar el terreno para la liquidación de febrero.
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Las publicaciones del domingo de Trump se produjeron justo cuando su zar de las criptomonedas, David Sacks, se prepara para ser el anfitrión de la primera cumbre de la industria de la Casa Blanca. El lunes, Sacks recurrió a la plataforma X para anunciar que vendió todas sus tenencias de criptomonedas, incluidas Bitcoin, Ether y SOL, antes de que la administración de Trump asumiera el poder en enero.
XRP es la criptomoneda asociada a Ripple Labs Inc., la empresa dirigida por Brad Garlinghouse. SOL y ADA son los tokens nativos de las cadenas de bloques Solana y Cardano. A continuación, se muestra un resumen de la historia de los tokens y las personas a las que están vinculados.
XRP
En febrero, Trump compartió una historia en CoinDesk sobre Garlinghouse en Truth Social, lo que provocó aplausos de los fanáticos de XRP (el token nativo de Ripple) y quejas entre otros ejecutivos de criptomonedas.
Garlinghouse había dicho en diciembre que la compañía planeaba donar US$ 5 millones en XRP para las festividades de la inauguración de Trump. Él y el director legal de Ripple, Stu Alderoty, han sido fotografiados cenando con el presidente en Mar-a-Lago.
Ese nivel de acceso político representa un marcado cambio de suerte para la compañía con sede en San Francisco, que fue demandada en 2020 por la SEC y acusada de ofrecer valores no registrados. Un tribunal de distrito de EE. UU. determinó más tarde que XRP era un valor cuando se vendía a inversores institucionales, pero no cuando se vendía a inversores minoristas, lo que se consideró una victoria en la industria de las criptomonedas. La SEC apeló ese fallo. Si bien la SEC ha abandonado muchas acciones de cumplimiento de las criptomonedas, la apelación de Ripple aún no se ha abandonado.
Fundada en 2012 y originalmente llamada Opencoin, Ripple fue una de las primeras empresas en comenzar a desarrollar tecnología de contabilidad distribuida para los servicios financieros tradicionales. Creó su propia plataforma con el objetivo de acelerar y reducir el costo de liquidación de pagos internacionales.
Al igual que muchas otras empresas emergentes de blockchain que apuntan a los flujos de servicios financieros tradicionales, ha tenido resultados mixtos, ya que los bancos han tardado en adoptar la tecnología.
Solana
Solana es la blockchain elegida por los emisores de las llamadas memecoins, activos digitales con poco valor intrínseco que, sin embargo, pueden aumentar de valor si logran captar la atención de los usuarios de las redes sociales, y que son propensos a implosionar con la misma rapidez.
Trump y su esposa Melania lanzaron memecoins en Solana en enero. El token del presidente ha bajado aproximadamente un 80% desde su máximo histórico de aproximadamente US$ 74, según datos de CoinGecko. En febrero, el presidente de Argentina, Javier Milei, se vio envuelto en un escándalo político después de dirigir a sus seguidores a una memecoin basada en Solana llamada Libra en una publicación en X.
Lanzada en 2020, Solana estuvo estrechamente asociada con el empresario Sam Bankman-Fried, ahora encarcelado, y su firma comercial Alameda Research. El precio de SOL, su token, cayó drásticamente después del colapso del imperio criptográfico de Bankman-Fried en noviembre de 2022.
Luego se recuperó en 2024 antes de alcanzar un máximo histórico de US$ 295 el 19 de enero, el mismo fin de semana en el que Trump estrenó su memecoin. Desde entonces, el token ha retrocedido un 45% para cotizar a unos US$ 160.
Cardano
Cardano, que se posiciona como rival de Ethereum, se lanzó en 2017 después de recaudar más de US$ 60 millones a través de una venta de sus tokens, según los registros de CoinGecko. A diferencia de Ethereum, que se considera la principal vía comercial de la industria blockchain, Cardano ha luchado por reclamar una gran participación de mercado en los mercados financieros descentralizados, que dependen de software automatizado en lugar de personas para ejecutar funciones.
Charles Hoskinson, cofundador y director ejecutivo de la empresa detrás de la cadena de bloques Cardano, dijo en un podcast publicado en X poco después de la victoria de Trump en noviembre que había estado ayudando a los legisladores estadounidenses a dar forma a la política de criptomonedas.
El valor total de los activos bloqueados en Cardano actualmente asciende a US$ 607 millones en comparación con los US$ 90,000 millones de Ethereum, según los datos de DeFiLlama.
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