
El presidente Donald Trump afirmó este sábado que Estados Unidos había completado “con éxito” un ataque contra tres instalaciones nucleares iraníes, los primeros bombardeos estadounidenses sobre terreno iraní que se producen en el marco del conflicto actual entre Israel y la República Islámica.
“Hemos completado con gran éxito nuestro ataque contra las tres instalaciones nucleares de Irán incluyendo Fordó, Natanz e Isfahán”, dijo el presidente en la red Truth Social.
Según el Pentágono, bombarderos estratégicos B-2 con bombas antibúnker de gran tonelaje apuntaron a la fortaleza subterránea de Fordó, la principal planta de enriquecimiento de uranio de Irán, en un ataque que se completó con el lanzamiento de hasta 30 misiles Tomahawk desde submarinos contra Natanz e Isfahán.

Irán, que ha negado reiteradamente estar desarrollando armamento nuclear, intercambia ataques aéreos con Israel desde el pasado 13 de junio, cuando el Ejército israelí bombardeó instalaciones nucleares y militares en territorio iraní.
La Organización de Energía Atómica de Irán anunció que no “han registrado señales de contaminación radioactiva”, luego de estos ataques.
Estas son algunas claves de las instalaciones nucleares que han sido atacadas por EE.UU:
1. Fordó
A unos 90 kilómetros al suroeste de Teherán, cerca de la ciudad santa de Qom, Fordó es la instalación de enriquecimiento nuclear más crítica de Irán, ubicada 80 metros bajo tierra para protegerla de ataques.
La planta se construyó en secreto y su revelación al mundo en 2009 desató una oleada internacional de críticas y sanciones a Irán.
Si bien no es la mayor planta de enriquecimiento de uranio del país, su posición estratégica es clave: sólo Estados Unidos posee bombas capaces de alcanzar el centro, asentado en el corazón de una montaña.
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En el acuerdo nuclear alcanzado en 2015 por Irán y el G5+1 (los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad y Alemania), el país persa se comprometía a transformar la planta subterránea en un centro de investigación científica.
Sin embargo, cuando Estados Unidos se retiró del pacto en 2018 bajo la presidencia de Donald Trump, Irán volvió a enriquecer uranio en todas sus plantas.

En mayo de este año el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) sugirió que el país había aumentado la producción de uranio enriquecido a un nivel del 60% en Fordó. El enriquecimiento necesario para fabricar armas nucleares es del 90%.
Según dijo el OIEA en un informe del 31 de mayo “Irán puede convertir su actual reserva de uranio enriquecido al 60% en 233 kilogramos de uranio apto para armas en tres semanas en la planta de enriquecimiento de combustible de Fordó”, lo que sería suficiente para nueve armas nucleares.

2. Natanz
Natanz alberga dos plantas de enriquecimiento de uranio: la planta subterránea de enriquecimiento de combustible (FEP) y la planta piloto de enriquecimiento de combustible (PFEP).
La FEP se construyó para el “enriquecimiento a escala comercial”, con capacidad para albergar 50,000 centrifugadoras de uranio. Actualmente hay allí instaladas unas 16,000 centrifugadoras, de las cuales unas 13,000 están en funcionamiento, refinando uranio hasta un 5% de pureza.

La PFEP sufrió daños el primer día de los ataques israelíes. El OIEA declaró el lunes que la infraestructura eléctrica de la planta había sido destruida por los bombardeos y que el corte de suministro eléctrico también podría haber dañado las centrifugadoras del lugar.
“Basado en el análisis continuo de imágenes satelitales de alta resolución recopiladas tras los ataques del viernes, el OIEA ha identificado elementos adicionales que indican impactos directos en las salas subterráneas de enriquecimiento en Natanz”, señaló la organización en la red social X.
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3. Isfahán
Isfahán, la segunda ciudad más grande del país, acoge el Centro de Tecnología Nuclear de Irán y una instalación de conversión de uranio.
Incluye la Planta de Fabricación de Placas de Combustible (FPFP) y la instalación de conversión de uranio (UCF) que puede procesar este material en hexafluoruro de uranio que es el que se introduce en las centrifugadoras.

En Isfahán hay equipos para fabricar uranio metálico, un proceso especialmente delicado desde el punto de vista de la proliferación nuclear, ya que puede utilizarse para diseñar el núcleo de una bomba nuclear.
Este centro ya se vio afectado por los ataques de Israel y recibió “importantes daños”, según informó el Ejército de Israel en las últimas semanas.
El OIEA ha afirmado que en Isfahán hay máquinas para fabricar piezas de centrifugadoras, describiéndolo en 2022 como un “nuevo emplazamiento” para este fin.