
El presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, denunció este jueves la “situación catastrófica de genocidio” que sufre la Franja de Gaza, donde los rescatistas palestinos denunciaron que las fuerzas israelíes mataron a 56 personas.
Tras más de 20 meses de conflicto, los más de dos millones de habitantes del estrecho territorio palestino enfrentan condiciones cercanas a la hambruna, denuncian grupos de defensa de los derechos humanos.
Israel intensificó recientemente su campaña de bombardeos en Gaza, en una ofensiva que afirma que busca “aniquilar” al movimiento islamista palestino Hamás, que desencadenó la guerra tras su ataque en el sur de Israel en octubre de 2023.

Tras dos meses de bloqueo, Israel empezó a permitir la entrada limitada de ayuda a finales de mayo, pero la distribución se ha visto empañada por escenas caóticas y noticias casi diarias de fuerzas israelíes disparando contra quienes esperan para recoger comida.
Desde Bruselas, donde se encuentra para una cumbre europea, el mandatario socialista español - muy pugnaz en sus críticas a Israel por su ofensiva en Gaza - urgió a la Unión Europea a suspender de inmediato el acuerdo de asociación del bloque con Israel.
Para ello invocó un reciente informe -no divulgado- del representante especial de la UE para los Derechos Humanos “sobre la situación catastrófica de genocidio que se está viviendo en Gaza”, presentado a los ministros de Relaciones Exteriores del bloque.
El texto, entre otros, cita el bloqueo israelí a la ayuda humanitaria, el elevado número de víctimas civiles, los ataques contra periodistas y los desplazamientos y destrucción masivos causados por la guerra.
“Sólo sobrevivieron dos niñas”
La Defensa Civil de Gaza reportó la muerte de 56 personas a manos de las fuerzas israelíes. De los fallecidos, seis murieron mientras esperaban ayuda en dos lugares distintos.
El ejército israelí afirmó que sus tropas efectuaron “disparos de advertencia” para impedir que “sospechosos se acercaran a ellos” cerca del corredor de Netzarim, en el centro de Gaza, donde los palestinos esperan recibir comida.
El conflicto estalló el 7 de octubre de 2023 con el ataque de Hamás en el sur de Israel, que resultó en la muerte de 1,219 personas, en su mayoría civiles, según un balance de AFP basado en datos oficiales.

Ese día, los milicianos islamistas secuestraron a 251 personas, 49 de las cuales siguen retenidas en Gaza, incluidos 27 rehenes que, según el ejército israelí, murieron en cautiverio.
En respuesta, Israel lanzó una implacable ofensiva en Gaza, donde ya murieron al menos 56,259 personas, en su mayoría civiles, según el Ministerio de Salud del territorio, gobernado por Hamás. La ONU considera esos datos fiables.
Imágenes tomadas por AFP el miércoles en un hospital del centro de Gaza mostraban a palestinos sollozando sobre bolsas ensangrentadas con los cuerpos de sus seres queridos.
“Mataron al padre, a la madre y a los hermanos, sólo sobrevivieron dos niñas. Una de ellas es un bebé de un año y dos meses y la otra tiene cinco años”, relató una persona que lloraba a sus familiares.
Entrega de material médico
Además de los bombardeos, el Ministerio de Salud de Gaza denunció que, desde finales de mayo, casi 550 personas han muerto cerca de los centros de ayuda mientras buscaban ayuda.
Desde finales de mayo, la distribución de ayuda está a cargo de la Fundación Humanitaria de Gaza (GHF), una organización opaca respaldada por Israel y Estados Unidos.
Las agencias de la ONU y las principales oenegés que trabajan en Gaza se niegan a colaborar con esta fundación que, según ellas, militariza la ayuda.

Las operaciones del organismo se han visto empañadas por escenas caóticas, muertes y problemas de neutralidad. La GHF niega que se hayan producido incidentes mortales en las inmediaciones de sus puntos de distribución.
Las restricciones impuestas por Israel a los medios en Gaza y las dificultades para acceder a algunas zonas impiden a AFP verificar de forma independiente las cifras de los rescatistas y las autoridades del territorio palestino.
La Organización Mundial de la Salud (OMS), por otro lado, anunció que realizó el miércoles su primera entrega de insumos médicos en Gaza desde el 2 de marzo, fecha en la que Israel impuso su bloqueo al territorio palestino.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, reportó este miércoles que hay “grandes avances” para un cese el fuego entre Israel y Hamás en Gaza.
Catar, uno de los mediadores, anunció el martes que impulsará nuevas conversaciones para lograr un alto el fuego.