
Escribe: Franco Muschi, socio de Derecho Laboral en Garrigues
El pasado 11 de junio, el Congreso de la República aprobó –con 95 votos a favor y 1 en contra– el dictamen que propone habilitar la billetera digital para percibir el pago de haberes y otras obligaciones laborales. De acuerdo a la exposición de motivos incluida en el Proyecto de Ley 04975/2022-CR (PL), abrir una cuenta de ahorro es “un proceso engorroso y complejo –sobre todo para los trabajadores informales– por ello se hace necesario que los haberes puedan pagarse a través de billeteras electrónicas, que es una herramienta arraigada en la economía de millones de peruanos”.
LEA TAMBIÉN: A la caza de responsables solidarios: Otra historia de terror
Con 7 de cada 10 trabajadores informales en el país, proyectos legislativos como estos nos llaman a reflexionar sobre si se trata de una medida que, efectivamente, nos lleve a elevar los porcentajes de formalidad en el empleo, pero, sobre todo, si se podría tratar de una mecanismo que incentive al empresario a cumplir con sus obligaciones laborales (o acercarse a la decisión de ser formal).
LEA TAMBIÉN: Condiciones iniciales para un sistema de pensiones
De manera específica, además de fomentar el uso de las billeteras digitales de manera masificada, el PL establece algunas premisas relevantes. En primer lugar, reconoce a las billeteras digitales como un medio de pago válido para que los empleadores depositen el pago de haberes y otras obligaciones de los trabajadores (sea en el sector privado o público). Además, se exige la existencia de un acuerdo entre empleador y trabajador con la finalidad de poder implementar la utilización de billeteras digitales para efectos laborales. Finalmente, se le concede los mismos principios, derechos y obligaciones aplicables al pago de haberes a través de cuentas bancarias.
LEA TAMBIÉN: El tren fantasma para Lima
Siendo una expresión más de modernización y digitalización de las relaciones laborales, resultará especialmente relevante determinar si en nuestro mercado laboral nos referimos exclusivamente al formal que se encuentra preparado para este tipo de procesos. Exigencias tales como la conservación de evidencias de constancias de depósito para salarios y beneficios laborales (aún cuando se hacen de manera telemática vía transferencia bancaria) o los requerimientos de documentación que, en el marco de procesos judiciales de naturaleza laboral, puedan efectuarse para sustentar el cumplimiento de obligaciones laborales, constituyen desafíos que deberán ser analizados cuidadosamente a efectos de no generar un perjuicio al empresario.
LEA TAMBIÉN: La deuda pendiente del seguro en Perú: crecer en un país subasegurado
Sumado a ello, el carácter alimenticio del salario, su intangibilidad e inembargabilidad –así como los efectos que ello genera sobre las “cuentas sueldo”– son elementos merecedores de una especial atención.
LEA TAMBIÉN: El dólar y su tendencia bajista: Los factores que la explican
Desde nuestro punto de vista, el uso cada vez más frecuente de las billeteras digitales puede dinamizar la economía (y las transacciones), pero consideramos que no generará necesariamente un impacto directo en los niveles de formalidad en el empleo. Por el contrario, en caso una medida como la propuesta surja como opción real, se deberán evaluar aspectos técnicos vitales para su adecuada viabilidad, evitando generar inconvenientes en un mercado formal cada vez más reducido.