Padres de familia de la institución educativa Raúl Porras Barrenechea, ubicada en el distrito de Ate, denunciaron el colapso de una parte del techo de uno de los pabellones del colegio, ocurrido el último viernes. Afortunadamente, el incidente no dejó heridos, ya que los estudiantes no se encontraban en esa zona en ese momento.
Los padres advierten que la infraestructura, con más de 60 años de antigüedad, ha sido declarada de alto riesgo por Defensa Civil y exigen la reubicación inmediata de los estudiantes, así como la intervención urgente del Ministerio de Educación (Minedu). El centro educativo ofrece los niveles de primaria y secundaria.
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“Estamos pidiendo la reubicación de nuestros hijos y la construcción de los módulos que están precarios. La construcción ya tiene más de 60 años. El viernes, el director contrató personal para que repare un techo supuestamente rajado, pero se ha venido abajo. Se hizo en horario de clases y se expuso a los profesores y estudiantes”, señaló Meik Chancazanam, presidente de la Apafa. También pidió el apoyo de la Ugel, el Minedu y la Defensoría del Pueblo para garantizar la seguridad de la comunidad educativa.
Marcos Tupayachi, director regional de Educación de Lima Metropolitana, informó que se han coordinado acciones inmediatas con la Municipalidad de Ate, Pronied, la Ugel 6 e ingenieros estructurales para garantizar la continuidad del servicio educativo en la institución afectada.
Marcos Tupayachi señaló que se coordina con la municipalidad la declaratoria de inhabitabilidad del pabellón dañado. Foto: Captura Canal N.
Explicó que lo ocurrido no fue el colapso de un techo, sino el desprendimiento de fragmentos de concreto durante trabajos de resane en una zona previamente identificada con fisuras. Aunque el hecho generó alarma entre los padres y estudiantes, aseguró que se tomaron medidas preventivas y el pabellón afectado ha sido completamente aislado. “El pabellón afectado no es un techo que se haya caído, era una resquebrajadura que iban a resanar y en el momento en que se ejecutaban los trabajos, empezaron a deslizarse pedazos de cemento”, manifestó.
“El siguiente paso será que la Municipalidad declare inhabitable ese pabellón, que alberga a unos 120 alumnos. Una vez emitida esa declaratoria, los ingenieros iniciarán los trabajos necesarios para luego, con Pronied, proceder con la elaboración del expediente técnico, lo cual permitirá su demolición”, indicó.
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Asimismo, Tupayachi precisó que se han identificado espacios alternativos para reubicar temporalmente a los estudiantes. Entre ellos, un colegio cercano actualmente desocupado, y una losa deportiva cerrada proporcionada por la municipalidad, donde se instalarán aulas modulares mientras se ejecutan las obras. De esta forma, señaló, se garantizará la continuidad del servicio educativo en condiciones seguras y adecuadas para los estudiantes.
