Durante el primer mes de funcionamiento del nuevo terminal del Aeropuerto Internacional Jorge Chávez, la Superintendencia Nacional de Migraciones inadmitió a 164 ciudadanos extranjeros que no cumplieron con los requisitos establecidos por la normativa migratoria peruana.
Las causas principales fueron la falta de visa o pasaporte válido, el incumplimiento del perfil de turista y razones vinculadas a la seguridad nacional y el orden público.
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Según informó la entidad, estas acciones se enmarcan dentro de los procedimientos regulares de control migratorio y elevan a 1,091 el número total de inadmisiones registradas en lo que va del año.
La decisión de inadmitir a un pasajero es tomada por los inspectores migratorios luego de una evaluación exhaustiva que incluye la verificación de documentos, el análisis del perfil del viajero y la revisión de alertas o impedimentos vigentes.
En algunos casos, los viajeros presentaron documentación falsa, adulterada o intentaron suplantar la identidad de otra persona. Para prevenir estos intentos, Migraciones utiliza herramientas tecnológicas como el Sistema de Información Avanzada de Pasajeros (APIS), además de sistemas de interoperabilidad con bases de datos de la Interpol, la Policía Nacional del Perú y otras agencias internacionales.
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Asimismo, la implementación de puertas electrónicas (e-gates) en el nuevo terminal permite detectar en tiempo real documentos inválidos o alterados, mediante la verificación biométrica y la consulta automática de registros migratorios. Estas e-gates están habilitadas únicamente para mayores de edad con pasaporte electrónico: ciudadanos peruanos, y extranjeros residentes en el país con carné de extranjería y calidad migratoria vigente.
Migraciones precisó que la inadmisión no implica que el pasajero haya cometido un delito, sino que en ese momento no reúne los requisitos exigidos para ingresar al territorio nacional. El retorno a su país de origen es asumido por la aerolínea que lo transportó.
