
Música, historias y mucha evolución. Así se definiría la carrera de Kevin Johansen y Ricardo Liniers Siri desde que colaboran juntos y han embarcado giras alrededor del mundo, sobre todo en Perú.
En la última década, Johansen ha llegado en al menos 8 ocasiones a Lima, de las cuales 3 con Liniers, historietista argentino conocido por su trabajo en la obra Macanudo, una serie de historietas, la cual sigue publicándose desde hace más de 20 años.
Los artistas conversaron con Gestión sobre su visión del panorama musical Latinoamericano y su visión de la historieta como crítica política.
LEA TAMBIÉN: LATAM Airlines y la tormenta perfecta: deuda, pandemia y una maniobra clave
¿Cómo se encuentra la música latina ante un panorama cambiante?
Johansen dijo que, ante un panorama cambiante en América Latina desde la década de 1980, cuando empezó su carrera, hasta la actualidad, la música latina ha sabido impulsarse.
Sostiene que “Perú siempre fue un país muy receptivo y curioso, y eso no ha cambiado”, pues “hay algo ahí que va más allá de las crisis, políticas, económicas y culturales, que en la Argentina también se viven”.
Para Kevin, estas dos épocas han representado un “boom cultural”, donde la música latina ha llegado, incluso, al mercado anglosajón.
“Creo que estas dos épocas, se podría decir, que son de boom cultural donde la música latinoamericana está funcionando fuerte. Se escucha mucha música en castellano, no solamente en el mundo hispanoparlante, sino en el mundo anglosajón”, añadió.
LEA TAMBIÉN: El mundo empresarial y la lectura: ¿Qué tan importante es y como influye en el sector?

“La pandemia ayudó mucho a esa generación a salir con furia”
Los artistas explicaron cómo la cultura ha evolucionado en América Latina, con el auge de la música en español a nivel mundial y una apertura cada vez mayor al arte.
Consideraron que durante la pandemia surgió una nueva ola de músicos jóvenes que aprovecharon el encierro para explorar y desarrollar su arte, lo que ha dado lugar a propuestas originales y con personalidad.
“Hay un boom enorme ahora de músicos jóvenes, que están todos con una personalidad muy fuerte. Esta Catriel y Paco Amoroso (pop), Duki (urbano), que explotan mucho en Europa, en Estados Unidos, todos lados. Haciendo el cálculo para atrás, son los pibes que tenían 16 años, 15 años, y que los encerraron en sus casas. Y claro, agarraron los instrumentos y aprendieron a tocar, a cantar, encontraron como una manera de hacer la (música) de ellos, muy personal. Influidos por Espineta, pero después está (creando) otra cosa”, indicó Liniers.
“La pandemia ayudó mucho a esa generación a aguantárselas, a salir con furia, a salir a buscar y también un público que estaba buscando representantes de su generación”, añadió Kevin.
LEA TAMBIÉN: Crece interés por libros de educación financiera: los títulos más destacados en la FIL 2025
La historieta como crítica política
En otra parte, Liniers destacó que la historieta ha dado un salto en los últimos años, incorporando la perspectiva femenina y temas sociales más profundos, alejándose de ser vista como un arte menor.
“Hace un tiempo hubo un momento que la historieta era primero solo dibujada por varones. La historia de la historieta, casi todo el siglo XX es eso. Muchos hombres, muchos superhéroes, aventuras, muchos chistes. En los últimos años entraron las mujeres y eso cambió mucho como se hacía”, mencionó.
“También durante muchos años la historieta era considerada como un arte menor. No se podían tocar temas serios, salvo por ahí haciendo humor en un diario. Eso también cambió porque apareció un libro como Mouse o Persepolis, que tocan temas muy block out, una chica creciendo en Irán, de mucho dolor humano, pero con historieta. Entonces, eso también abrió la puerta a que ahora podaos hacer historieta con todo”, añadió.
Además, defendió el valor de la crítica política a través del humor gráfico y subraya la importancia de la libertad de expresión, incluso cuando incomoda a los políticos.
“Lo que pasa acá (Perú) y en otros países latinoamericanos, pero sobre todo en Venezuela y en Estados Unidos también, es que al político le cuesta mucho el humor, porque no tienen cómo defenderse de él. Porque generalmente el político está armado sobre una búsqueda de poder y el humor desarma eso”, acotó el Liniers.
“Entonces a Donald Trump, si te fijas, se enoja mucho más con Alec Baldwin porque lo imita en un programa de televisión, o con Steven Colbert, que con temas serios. Necesitamos el periodismo bueno y necesitamos la crítica política buena. Estamos en un momento donde la verdad está muy metida abajo, un montón de basura que nos viene por el teléfono. Entonces es difícil encontrar la verdad. Y el humor, para que funcione, tiene que tener algo verdadero adentro”, puntualizó el historietista.

Cariño por el Perú
Los artistas comentaron sobre el afecto especial que sienten por el público peruano, el cual fue el primero fuera de Argentina en recibirlos cálidamente. Explican que la conexión se dio de manera natural y orgánica.
“Perú es casita hace muchos años. Perú fue el primer lugar fuera de la Argentina al que llegué con la banda (Instrucción Cívica). Después hice mi vida y volví con una carrera solista incipiente que venía arrastrando y arrancó el milagro de encontrar público. Cuando tuve esa fortuna de encontrar ese público, se fue expandiendo y extendiendo rápidamente por Latinoamérica. Lo curioso es que a Liniers también, el primer lugar fuera de la Argentina al que llegó fue aquí en Perú”, indicó Johansen.
Kevin Johansen y Liniers llegaron a Lima para presentarse en la Feria del Libro de Lima, donde dieron un conversatorio en el auditorio Blanca Varela. Asimismo, tendrán presentaciones en el Teatro Nacional el 7 y 9 de agosto.