Aunque no es tan difundido, algunos corredores bursátiles en nuestro país ofrecen cuentas para menores de edad. Así, los niños pueden invertir en la Bolsa de Valores de Lima (BVL).
¿Qué condición debe cumplirse para abrir una de estas cuentas? En primer lugar, el menor debe poseer una cuenta bancaria mancomunada con algunos de sus padres.
“En el espectro de la edad, está concentrada entre los 11 y 12 años, pero hay de todas las edades, 8 años, 10 años, etc”, refirió Marco Pizzali, gerente comercial de Inversión y Desarrollo SAB, una de las sociedades de bolsa que ofrecen este producto.
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“Hay personas que tienen incluso tienen menos de un año y ya (sus padres) le crean una cuenta de inversión”, señaló Julio César Plácido, gerente comercial de Corredores & Fondos de la BVL.
Actualmente, 648 menores de edad invierten en la bolsa unos S/ 26.7 millones, monto que representa un crecimiento de 24% respecto de lo reportado hace 10 años. Sin embargo, la cifra aún sigue siendo menor al máximo alcanzado en el 2019 de S/ 36.5 millones (Ver cuadro).
“Más del 90%, o casi la totalidad de esos 600 menores de edad, tienen padres que ya invierten en la bolsa o que están vinculados de alguna manera (con el mercado bursátil). Eso viene de un poco este predicar con el ejemplo”, afirmó Plácido.
¿En qué invierten principalmente estas cuentas? Según Pizzali, empiezan por las empresas más conocidas y más cercanas, que son las locales. Luego, seleccionan a los líderes de cada sector, o a las acciones con posibilidad de generar más dividendos cada año, o a empresas que muestran un crecimiento sólido. “Todo ello sirve como criterio para ir armando su portafolio”, aseguró el ejecutivo.
“Una vez que se familiarizan con las empresas locales, gracias a la información que brinda el bróker que se asigna a esa cuenta, van conociendo también algunos instrumentos del mercado extranjero. Allí también inicia una diversificación de valores”, acotó Pizzali.
Identificación
Una forma de hacer viable el proceso de inversión de un niño o adolescente es vincular a las empresas que cotizan en la BVL con sus productos, recalcó Julio Plácido de la BVL.
“A un menor de edad, tú lo puedes aterrizar diciéndole: lo que tú consumes todos los días como una mayonesa Alacena, eso viene de Alicorp. Después, la persona va creciendo y va adquiriendo, por ejemplo, una computadora Apple (empresa en la que también podrá invertir)”, indicó el directivo de la bolsa.
En tal sentido, lo que se observa, según Pizzali y Plácido, es una vinculación entre el menor de edad y las mercancías o las marcas de la compañía en la cual invierte.
“Los niños comienzan a tener una mayor un mayor consumo de los productos (de las empresas) de las que ya son accionistas. Es curiosa esta anécdota porque toda la familia quizás ahora también consume esos productos, para así ayudar a su compañía a que tenga unos buenos resultados y eso se refleje en un mejor rendimiento de su portafolio”, sostuvo Pizzali.
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¿Cómo invertir?
Para abrir una de estas cuentas, las personas deben acercarse a una sociedad agente de bolsa. No todas disponen de esta alternativa, pues depende del público al cual se dirigen.
“Unas 16 corredoras de bolsa ofrecen (en el país) este producto de cuentas de menores. Todas las sociedades están habilitadas para poder hacerlo, pero no todas se especializan en personas naturales. Algunos corredores son muy institucionales o van dirigidos a inversionistas extranjeros”, aclaró Plácido.
Comisión
Una de las ventajas que ofrecen estas cuentas, destacó Pizzali, es que pueden ofrecer comisiones relativamente bajas. Por ejemplo, en el caso de Inversión y Desarrollo SAB, la comisión es de 1% para la cuenta de un menor de edad. Así, por un monto de S/ 3.500, el cobro es de S/ 35. En cambio, para una cuenta de persona natural (mayor de edad), la comisión no es un porcentaje, sino que siempre existe un mínimo de S/ 70.
Excepción
Las cuentas para menores de edad son de acumulación, es decir, no se puede retirar el capital hasta que el titular cumpla la mayoría de edad. Sin embargo, existen casos especiales en los que un juzgado de familia autoriza la venta de los valores para asegurar la manutención del menor, por ejemplo, en el caso del fallecimiento de algunos de los padres, precisó Marco Pizzali, gerente comercial de Inversión y Desarrollo SAB.
Economista con trayectoria en periodismo y medios digitales.
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