Algunos sectores en el país son atractivos a los ojos de los inversionistas para operaciones de fusiones y adquisiciones. Y mientras para algunos expertos estas transacciones se concretarían más adelante, para otros el ritmo de estas negociaciones disminuirá.
Los bancos de inversión internacionales estuvieron muy activos en fusiones y adquisiciones (M&A) en el Perú en el 2023, ante la menor incertidumbre, lo que ha permitido atraer inversionistas extranjeros, detalló el managing director de Bank of America Merrill Lynch, Antero Carrillo.
“Varias (de estas operaciones) han sido bastante grandes y hemos estado activos, particularmente, en el sector de infraestructura de puertos y de electricidad”, comentó.
El 2023 fue mejor que el año previo y sigue habiendo apetito por invertir a largo plazo en Perú, expresó.
“Ese apetito (por empresas) en el sector infraestructura se trata de una apuesta a bastante largo plazo, en un rubro con riesgo regulatorio no menor, y, aún así, Perú es capaz de atraer inversionistas que se van a quedar por un tiempo bastante largo”, destacó.
Se observa, además, mucho interés por los sectores agrícola y salud , apetito que se irá materializando en transacciones anunciadas (de fusiones y adquisiciones) en los próximos meses, manifestó.
Ello será posible el país sigue mostrando estabilidad a los inversionistas internacionales, pues ese es un factor clave para ser atractivos para operaciones de fusiones y adquisiciones, añadió Carrillo.
Por su parte, el docente de Finanzas de la Universidad ESAN, Arturo García, destacó que en el 2021 se aprobó la Ley 31112, que fija el control previo de las operaciones de concentración empresarial, o fusiones o adquisiciones.
“Estas operaciones deben ser aprobadas por Instituto Nacional de Defensa de la Competencia y de la Protección de la Propiedad Intelectual (Indecopi), entidad encargada de evaluar los efectos en el mercado y los consumidores, y evitar los monopolios y oligopolios”, comentó.
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Operaciones en últimos dos años
En los últimos dos años hubo alrededor de 30 operaciones aprobadas por el Indecopi, las cuales correspondieron a los sectores eléctrico, minería, automotriz, retail, entre otros, señaló el docente. “Sin embargo, ello fue por un embalse de operaciones de fusiones pendientes”, acotó.
En ese sentido, previó, considerando el bajo crecimiento de la economía en el 2022, el estancamiento y recesión en el 2023 y la baja expansión esperada en los próximos tres años, que disminuirá el ritmo de fusiones.
Ese bajo crecimiento previsto en los próximos tres años tiene en cuenta el clima de desconfianza e inestabilidad para las inversiones privadas, lo que a su vez se traduce en una disminución de la misma, agregó.
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