Los resultados financieros de las cajas municipales y rurales se recuperan en el primer tramo del año y muestran incrementos, aunque la colocación de créditos aún no despega.
Así, las utilidades netas de las cajas municipales repuntaron de S/ 3.6 millones en el primer trimestre del 2024 a S/ 121.5 millones en el mismo periodo de este 2025, de acuerdo con estadísticas de la Superintendencia de Banca, Seguros y AFP (SBS). Ocho de las 11 entidades ediles incrementaron ganancias, en dos se redujeron y solo una reportó pérdidas.
En igual dirección, las cajas rurales pasaron de reportar pérdidas, en promedio, de -S/ 10.5 millones a obtener ganancias de S/ 1.9 millones en el mismo lapso. Si bien tres de estas instituciones están en rojo, lograron reducir sus pérdidas en el último año, y las dos restantes elevaron utilidades.
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Las cajas municipales y rurales han mejorado su gestión de riesgos, capacitaron a analistas y ejecutivos para mejorar calidad de su cartera, reenfocar sus créditos y apoyar a clientes con inconvenientes, dijo a Gestión Edmundo Lizarzaburu, docente de la Universidad Esan.
Ahora, estas medidas empiezan a cosecharse en margen de ganancia y en menores gastos por provisiones –ante la probabilidad de incumplimiento de los deudores–, agregó.
Créditos
Sin embargo, los préstamos avanzan a menor ritmo, con tasas de crecimiento menores a 3% en el último año.
Ronald Casana, representante del Colegio de Economistas de Lima precisó que aún hay incertidumbre sobre la evolución de la economía, lo que ha llevado a ambos tipos de cajas a mantener rígidas políticas de otorgamiento de crédito.
“Vemos que se están arriesgando más que en años previos, pero no tanto como para otorgar financiamiento en condiciones más flexibles como antes de la pandemia”, expresó.
Para el economista, el segmento más difícil de recuperar es el de medianas empresas pues fueron las más golpeadas.
“No es como darle un préstamo a una bodega; son empresas formales constituidas con tamaño relevante y les está costado mejorar sus resultados, tienen dificultades con algunos bancos, atraviesan problemas de refinanciamiento o sus propios clientes están en morosidad”, advirtió.
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Morosidad
Otro indicador clave en el grupo de cajas municipales es la mora que, en promedio, se elevó de 6.8% a 7.7% en el periodo analizado. Aunque en las cajas rurales se observa una recuperación al reducirse de 7.31% a 6.77%.
La evaluación más ad hoc que realizan algunas instituciones ha permitido que, si bien el crecimiento de la cartera no va a una velocidad acelerada como en años anteriores, la mora empiece a bajar, señaló Lizarzaburu.
“Puede que este indicador continúe la misma senda de mejora, más aún con las políticas de crédito conservadoras que han tomado estas instituciones; todavía no son flexibles pero tampoco son austeras”, manifestó Casana.
En tanto, la rentabilidad patrimonial de las entidades avanza en línea con las mayores utilidades netas conseguidas en el primer trimestre. En las cajas ediles el indicador subió de 2.4% a 10.4% en el último año, mientras que en las rurales sigue en rojo pero se redujo de -21% a -5%.
- Desaceleración. La recuperación de los beneficios netos de las cajas municipales y rurales podría aminorar el ritmo en la segunda mitad del año a medida que se acercan los comicios, estiman especialistas. “El primer semestre incluye la campaña escolar, Día de la Madre y parte de Fiestas Patrias, esas deberán ser aprovechadas por los negocios pues en la segunda mitad será un poco más complicado”, dijo Ronald Casana.
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Economista de la Universidad de Piura. Actualmente se desempeña como redactor de Finanzas en Diario Gestión.
